La estudiante de PrepaTec Irapuato es integrante del grupo de robótica TecGear y maneja el robot en FIRST Robotics Competition
Por Ricardo Treviño | Redacción Nacional CONECTA - 14/03/2023 Fotos Eric Ramírez

Cuando comenzó la invasión rusa, Kira Borysovna Tkachenko fue parte de la diáspora ucraniana que tuvo que dejar su hogar para emigrar a otras partes del mundo.

Actualmente, la joven de 15 años se encuentra en México en casa de su hermana y estudia en PrepaTec Irapuato, donde se integró al equipo de robótica TecGear.

La vida cambia todo el tiempo: una mañana te despiertas y, sin esperar que suceda, todo a tu alrededor se modificó por completo; hoy lo que quiero es explorar el mundo”, comenta.

“Cuando llegué a PrepaTec estuve hablando con una chica y me dijo: ‘Si te gusta la ciencia puedes intentar ir al equipo de robótica, tal vez te guste’. Una vez que entré al laboratorio, sentí de inmediato que era mi nuevo hogar”, agrega.

Sin embargo, la driver del equipo TecGear comenta lo difícil que fue dejar su país por la guerra, y al llegar a México, no hablar el idioma español.

 

Kira tiene 15 años y es originaria de la ciudad de Odesa en Ucrania

 

Por la guerra inicia peregrinaje con destino a México

Kira vivía en la ciudad ucraniana de Odesa, una de las urbes más grandes de su país, ubicada al sur.

“Ahora mismo ese territorio no está ocupado, no hay soldados peleando entre sí, pero es una ciudad afectada por la guerra”, comenta.

Al desatarse la guerra, ella tuvo que abandonar el país, dejando a su padre, amigos y su hogar; para ella fue como comenzar desde cero.

Junto a su mamá, cruzó la frontera hacia Moldavia, y eventualmente a Rumania para volar hacia México en busca de reunirse con su hermana, quien ya vive en el país desde hace 3 años al estar casada con un mexicano.

El trayecto no fue fácil; tuvieron que estar en Rumania varios días, no llevaban mucho dinero, no sabían cuánto tardarían y alojarse en un hotel no era opción,

Nadie quería ayudarlas, recuerda, hasta que recibieron auxilio de una pareja de voluntarios que tenían un niño pequeño y un bebé.

"Es la mejor familia que he conocido en mi vida, era difícil para ellos ayudarnos y aún así lo hicieron. Probablemente, sin su apoyo, hoy no estaría aquí.

“Antes de ir al aeropuerto, me dieron un brazalete del árbol de la vida; es como la representación de cuando sientes que se acabó, que es el fin del mundo y no te queda nada, va a haber gente buena que va a ayudar.

 

El desafío de rehacer su vida en México

Los primeros días en México fueron complicados por la falta de algunos documentos escolares y que no sabía el idioma español.

“No tenía mis documentos para seguir estudiando, pero mi familia trabajó muy duro para que pudiera continuar mis estudios".

El trabajo de su familia se tradujo en la obtención de una beca para PrepaTec, que la hizo al integrarse también al grupo de teatro.

Admite que ha sido un desafío el tener todas las clases en español, idioma que aún no lo domina, pero sí lo logra entender cada vez más, utilizando el idioma inglés para hacerse entender.

 

"Una mañana te despiertas y, sin esperar que suceda, todo a tu alrededor se modificó por completo; hoy lo que quiero es explorar el mundo".

 

Desde niña, lo suyo es la ciencia y la tecnología

La joven lo tiene claro, definitivamente, ella es una persona de matemáticas y de ciencias, sabe que es algo que lleva en la sangre y que, sin duda, heredó de su familia.

“Casi toda mi familia ha estado relacionada a la ciencia, todos mis abuelos eran ingenieros, mi abuela era ingeniera física y mi padre es ingeniero de TI. Desde niña, siempre estuve entusiasmada con eso y me gustaba ver películas sobre ciencia y cosas interesantes”, dijo.

Incluso, platicó que en ocasiones ayudaba a su padre en algunos proyectos y tenía algunos pasatiempos como juegos numéricos en los que aprovecha para agilizar su memoria.

Es en PrepaTec donde ha encontrado la oportunidad de competir en FIRST Robotics Competition, dice Kira.

Agrega que un tipo de experiencia que nunca había tenido, y en la que ve grandes aprendizajes de valor para su formación, como valores y habilidades.

“FIRST te ayuda a tener estabilidad mental, mejora tus habilidades de comunicación y de resolución de problemas, porque aprendes a lidiar mejor con los retos y a trabajar en equipo y a colaborar con otros equipos de tu alianza”, comenta. 

Sin embargo, Kira admite que en su natal Ucrania no había tenido la oportunidad de sumarse a un proyecto como FIRST Robotics Competition, donde hoy en su equipo es la encargada de operar los mecanismos del robot de TecGear.

“Estoy muy agradecida de tener la oportunidad de estar aquí y probar todo esto y, de hecho, las competencias de FIRST me ayudan mucho con todo lo que está sucediendo y lo que ha pasado en mi vida”, platica la estudiante.

“Para mí es una mezcla de sentimientos porque tengo ansiedad y nervios, pero todos en el equipo me apoyan; es raro, pero agradable, saber que con tus brazos controlas una máquina enorme de 46 kilogramos... es una experiencia única.

 

Kira muestra el brazalete que le regaló la pareja que los auxilió antes de partir hacia México.
Debido a la guerra, la joven dejó en Ucrania su hogar, familiares y amigos.

 

Encuentra en México un nuevo hogar

Otro de los desafíos para ella como extranjera al estar en México es, entre otros, la comida, comenta entre risas.

“La comida es otro gran desafío porque soy vegetariana y la comida mexicana tiene que ver mucho con la carne y sabores picantes que no me gustan mucho; ha habido otros choques culturales porque crecí en un mundo completamente diferente, en otra parte del planeta”.

Sin embargo, Kira también admite que algo que realmente le gusta de México es la calidez de las personas y la mentalidad para siempre tener una actitud positiva ante los desafíos.

“Por ejemplo, (Mauricio) Chávez, mecánico de nuestro equipo, es una persona increíble que sabe lo que el equipo necesita; soy una persona muy estresada y cuando hay problemas él dice: ‘No te preocupes, todo va a estar bien, lo vamos a solucionar pase lo que pase'”, comentó Kira.

 

“Estoy muy agradecida de tener la oportunidad de estar aquí y probar todo esto y, de hecho, las competencias de FIRST me ayudan mucho con todo lo que está sucediendo y lo que ha pasado en mi vida”.

 

Sin embargo, la joven dice que se siente emocionada por tener la oportunidad de seguir estudiando y además, de tener espacios para continuar teniendo experiencias en tecnología.

“Hay momentos en los que me siento ansiosa y cansada, por ejemplo, cuando tengo un evento de teatro o tengo exámenes y al mismo tiempo necesito prepararme para una competencia.

“Pero soy agradecida de estar aquí, porque sé que hay muchas otras personas en la misma posición que yo que nunca tendrán este tipo de oportunidades”, agregó.

 

Mantiene el contacto con los suyos

La estudiante platica que aunque ha sido complicado por los cortes eléctricos y la inestabilidad de Internet, ha podido mantenerse en contacto con su familia y amigos.

“Incluso, mi mejor amiga estaba viendo mi competencia por Twitch y me estaba enviando mensajes de texto como felicitaciones por haber ganado un match y cosas así.

“Todavía me mantengo en contacto con muchas personas de Ucrania, aunque es complicado”, agregó Kira.

Hoy, la joven no sabe qué le depara el futuro y ante los cambios que ha experimentado recientemente en su vida ha preferido no hacer muchos planes hacía muy adelante.

“Espero que sea posible ir hacia algún lugar del norte, porque soy totalmente invernal, me gusta la nieve y cosas así, irme a un lugar tranquilo y estudiar algo relacionado con la ciencia, la ingeniería y la robótica, tal vez relacionado con la medicina”, agregó.

Por último, Kira compartió una reflexión que escuchó en FIRST y que relaciona mucho con ella misma, con su experiencia de vida, la guerra y otras vivencias: “no importa cuántas veces falles, lo que importa es que sigues de pie y sigues adelante”.

 

Al ingresar a PrepaTec Irapuato la joven se incorporó al equipo de robótica TecGear.

 

FIRST: el aula mundial de la robótica

FIRST (acrónimo de For Inspiration and Recognition of Science and Technology, "Para la Inspiración y Reconocimiento de la Ciencia y Tecnología", en españoles un torneo de robótica conceptualizado como un deporte aspiracional para interesar a niños y jóvenes en la ciencia.

Fue creado en 1989 por Dean Kamen, destacado inventor y emprendedor, quien creó el Segway, el vehículo vertical de dos ruedas.

 FIRST Robotics Competition es la justa de robótica dirigida a jóvenes entre 14 y 18 años.

En el Tec campus Monterrey se llevó del 1 al 4 de marzo el primero de los 3 torneos regionales en México; el segundo será en el campus Puebla del 15 al 18 de marzo, y el tercero en campus Laguna, del 22 al 25 del mismo mes.

 

 

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