El área de Arte y Cultura del Tec Guadalajara a través de su grupo de baile folclórico llamado Estampas de México presentó el espectáculo “Nochecita Guerrerense”, inspirado en las tradiciones y la cultura del estado de Guerrero, México.

Bajo la dirección escénica de Beto Ruiz y con un escenario que combinaba canto, luces, música en vivo, actuación y baile, la obra se presentó al aire libre en las instalaciones del campus Guadalajara y cada función tuvo un aforo completo.

La puesta en escena incluyó elementos representativos del estado de Guerrero, como danzas tradicionales, vestuario y escenografía. La presentación atrajo a más de 1,000 espectadores, entre estudiantes, padres de familia y público en general.

Nochecita Guerrerense del grupo Estampas de México se basó en una adaptación de Los Cuervos Están de Luto, de Hugo Argüelles, una obra mexicana de los 60 que aborda temas como la hipocresía y la avaricia en una familia rural mexicana.

El espectáculo contó con la participación de 81 estudiantes del campus:

• 21 cantantes
• 21 actores
• 20 músicos y
• 19 bailarines.

Homenaje al estado de Guerrero

Beto Ruiz indicó que en esta edición: “buscamos ofrecer una representación auténtica de Guerrero, creando un espacio donde los estudiantes pudieran explorar sus raíces y explorar su legado cultural”.

Comentó que la investigación para el espectáculo se sustentó en consultas con expertos y en un estudio de las referencias culturales del estado, al explorar a fondo las danzas, estilos musicales y vestuarios que caracterizan a la región.

Asimismo, uno de los elementos más destacados de la obra, señaló, fue el uso de videomapping para proyectar imágenes de fondo durante la representación, incorporando artesanías, texturas y gráficos que evocaron la esencia de Guerrero.

Leticia Panduro, líder de la compañía Estampas de México, subrayó que esta adaptación “requirió un esfuerzo colaborativo entre el grupo de danza folclórica, el mariachi y los cantantes, para representar fielmente las tradiciones de la región”.

Añadió que la planeación del espectáculo comenzó desde el primer semestre de 2024 y tras el periodo de ensayos y preparación, se efectuaron 2 funciones al aire libre dentro de las instalaciones del Tec Guadalajara.

Interpretar desde el corazón

Los estudiantes del campus señalaron que, para las partes vocales y musicales, participaron en ensayos y clases especializadas de canto e instrumentos, con el propósito de capturar fielmente la esencia del estado de Guerrero.

“Para preparar nuestra voz, tuvimos que crear un personaje, desarrollando su personalidad y nombre a partir de datos curiosos que investigamos para darle vida durante la obra”, compartió Carla Preciado, alumna y cantante de la producción.

Añadió que “siempre que estábamos a punto de cantar o interpretar alguna canción, nos conectábamos con nuestros personajes para contar una historia de manera más real y orgánica”.

“Era necesario conectar tu interpretación vocal con el alma, ya que cada canción del show era muy íntima; cada uno debía cantarla desde el corazón, no sólo con la voz”, aclaró José Becerril, también participante de la obra.

A su vez destacó que “esta producción nos ayudó a crecer como cantantes, explorar nuevos estilos vocales y comprender la intención detrás de cada interpretación, además de acercarnos más a la cultura mexicana”.

Transformar el cuerpo y alma

Por otro lado, la actuación y danza también desempeñaron un papel esencial en la estructura del espectáculo, al guiar al público a través de diversos aspectos culturales de Guerrero.

“Para cada personaje tuvimos que aprender expresiones y frases que antes no conocíamos, para acercarnos a la representación de los habitantes de los pueblos guerrerenses", afirmó Arantza Cuéllar, alumna y actriz de la producción.

Puntualizó que “la actuación aquí no sólo fue un complemento, sino que brindó contexto y profundidad a cada danza y pieza musical, sumergiendo al espectador en la cultura de Guerrero desde un enfoque emocional”.

“Desde los ensayos hasta la presentación, transformamos nuestra expresión corporal y cada movimiento, adaptando nuestro lenguaje físico a las danzas y la música del espectáculo”, expresó Juan Carlos Vega, otro de los participantes de la obra.

Mencionó también que “cada edición de Estampas de México es única, pero todas comparten y transmiten la misma esencia: esa energía mexicana y el amor que sentimos por nuestro país”.

“En Estampas de México siempre buscamos preservar nuestras tradiciones y acercar a los jóvenes a la cultura mexicana".- Beto Ruiz.

Un tributo a la diversidad cultural

Finalmente, el director Beto Ruiz reflexionó que “el mensaje principal de Nochecita Guerrerense es transmitir el orgullo por la riqueza cultural de México y brindar a los estudiantes una visión más profunda de nuestra realidad”.

“En Estampas de México siempre buscamos preservar nuestras tradiciones y acercar a los jóvenes a la cultura mexicana a través de disciplinas como el canto, la música, la danza y la actuación”, finalizó Leticia Panduro.

“Participar en este tipo de producciones es muy significativo, ya que nos permite conocer una cultura y nos enseña a valorar y respetar la cultura mexicana a través del arte”, concluyó Carla Preciado.

Esta edición de Estampas de México contó con la colaboración de:

• Dirección general: Beto Ruíz
• Dirección vocal: Paz Villaseñor y Daniela Jiménez
• Dirección coreográfica: Laura Vázquez
• Dirección musical: Armando Cervantes, Rogelio Uribe y Hayley Armstrong
• Producción general: Yolanda González
• Líder de compañía: Leticia Panduro.

Adicionalmente, contribuyó el equipo de Arte y Cultura: Marco Antonio Hernández, Alfredo Morfín, Mercedes Sánchez, Hugo Sánchez, Carlos Quezada y Brenda Fletes.

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