En 1943 Garza Sada reunió a un grupo de empresarios regiomontanos y cristalizó la idea de crear una institución que impulsara el desarrollo de México
Por Redacción CONECTA - 21/08/2024

"La educación lo puede todo". Esa fue la visión de Don Eugenio Garza Sada, líder humanista y empresario, que lideró la creación del Tecnológico de Monterrey en 1943.

Don Eugenio creía firmemente en que el desarrollo humano conduciría a que México fuera un mejor país. 

Desde los inicios de la institución, y por muchos años, Don Eugenio fue, al mismo tiempo, promotor, colaborador y supervisor de su crecimiento.

 

 

A continuación, presentamos algunos de los sucesos más importantes del fundador del Tec.

 

Primeros años y su formación

Eugenio Garza Sada nació en Monterrey, Nuevo León; fue descendiente de una familia de empresarios de la ciudad.

Issac Garza, su padre, fue uno de los fundadores de la Cervecería Cuauhtémoc en 1890.

Su infancia transcurrió en la etapa en la que la capital regiomontana se convertía en uno de los principales centros industriales de México, tras ser un lugar dedicado al comercio y a la agricultura.

Una de las etapas que marcarían la vida de Don Eugenio fue el año de 1913, cuando debido a los conflictos políticos en los que se encontraba México, su familia dejó el país para buscar refugio en el exilio norteamericano, en donde trabajó como dependiente de una tienda y acomodador en un cine.

En Estados Unidos, Don Eugenio estudió la escuela preparatoria en la Western Academy.

Don Eugenio Garza Sada comenzó su relación con el Massachusetts Institute of Technology (MIT) en 1910, cuando ingresó a esta prestigiosa institución.

Cuatro años después, en junio de 1914, logró obtener su título de "Bachelor of Science in Civil Engineering".

 

 

Su regreso a México

En su regreso a México, en 1917, comenzó a trabajar en la Cervecería Cuauhtémoc. Detrás de cada máquina, mesa o ventanilla de servicio, veía al ser humano que las atendía; así, su trato con sus colaboradores y empleados fue amable y cercano.

Su primer puesto en Cervecería Cuauhtémoc fue el de auxiliar del Departamento de Ventas. Ahí fue ocupando, sucesivamente, puestos de mayor responsabilidad.

Don Eugenio fue un incansable defensor de la empresa privada y de la libertad de emprender.

Se casó en 1921 con Doña Consuelo Lagüera Zambrano, y posteriormente nacieron sus ocho hijos, quienes, junto con Doña Consuelo, ocuparon siempre el primer lugar en las prioridades de Don Eugenio.

Cuando murió, casi 56 años después, en 1973, era el Presidente del Grupo Valores Industriales, S. A., (VISA) -que reunía a varias empresas- que se había formado en torno a la propia Cervecería.

 

Don Eugenio Garza Sada

 

Visión: impulsar la educación de México

“Usted me alega que será muy costoso levantar un Instituto como el MIT en nuestro país - como si yo no lo supiera de sobra- pero dígame si no es más caro que los jóvenes carezcan de opciones de calidad o deban ir a formarse a otros lugares", dijo Don Eugenio Garza Sada a León Ávalos y Vez, el primer rector del Tec en 1943.

La frase registrada en los manuscritos de José P. Saldaña muestra la visión de Garza Sada desde aquel 14 de julio de 1943, cuando siendo director de Cervecería Cuauhtémoc, convocó a un grupo de empresarios y profesionistas regiomontanos para constituir Enseñanza e Investigación Superior A. C.

Su propósito era operar una institución particular de enseñanza del más alto nivel académico, inspirado en el MIT donde se graduó de Ingeniero Civil en 1914.

Se buscaba contribuir al fomento de la ciencia, la tecnología y la cultura nacional.

Fue el 6 de septiembre del mismo año cuando, en una casona ubicada en la calle Abasolo Oriente No. 858, en el centro de la ciudad de Monterrey, el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM) inició sus actividades.

 

Don Eugenio Garza Sada

 

En lugar de los 150 alumnos que se esperaban para iniciar las clases, llegaron 350, ello hizo que la vieja casona de Abasolo fuera insuficiente.

Hubo de conseguirse sobre la marcha un nuevo local adicional y fue éste el tercer piso del antiguo edificio del Banco de Nuevo León, en Morelos y Parás.

Más tarde, hubo de obtenerse otro local más y otro más, y otros hasta finalmente, en 1947, pasar a ocupar el primero de los edificios -Aulas 1- que se construyó del conjunto que forma el ahora grandioso recinto universitario del Campus Monterrey.

A partir de ese entonces, el Tecnológico de Monterrey es uno de los sistemas universitarios más importantes de Latinoamérica: cuenta con campus en 28 ciudades de Méxicoy sedes en diferentes partes del mundo, así como la universidad Tecmilenio, y TecSalud.

También, ha adquirido prestigio internacional, demostrado a través de diferentes rankings globales, donde cada año ocupa posiciones más altas en la lista.

 

Premio Eugenio Garza Sada, homenaje a su legado

Inspirados en el legado de Don Eugenio Garza Sada, Femsa y el Tecnológico de Monterrey se unieron para crear una distinción única.

El Premio Eugenio Garza Sada nació como un homenaje a los valores y la visión que habían marcado a Don Eugenio. Este galardón es una distinción para quienes se comprometen a crear soluciones innovadoras que promueven el bienestar y el desarrollo económico y social en México.

A lo largo de tres décadas de historia, más de 70 ganadores han ascendido al escenario del Premio Eugenio Garza Sada, cada uno con una historia de impacto en su comunidad. Sus iniciativas han impactado las vidas de más de 8 millones de personas en diversas comunidades mexicanas.

 

 

El Premio se despliega en tres categorías distintas, cada una con su propia esencia: Liderazgo empresarial humanista, Emprendimiento social e Innovación social estudiantil. Cada una rinde homenaje a individuos y organizaciones que, con un compromiso, han dejado su marca en la construcción de un México más justo y próspero.

No es solo un diploma lo que los ganadores reciben; es una expresión de reconocimiento y gratitud por su dedicación. Una escultura conmemorativa llamada "Luz interior" les brinda un símbolo tangible de su contribución. 

Además, una placa en el mural de reconocimientos del Campus Monterrey del Tec les otorga un lugar permanente en la historia. Pero más allá de los símbolos, se les proporciona un incentivo económico sustancial, con premios que ascienden a 2 millones de pesos en cada edición, para impulsar aún más sus nobles causas.

 

Ideario de don Eugenio Garza Sada

Don Eugenio Garza Sada estableció el Ideario Cuauhtémoc, también conocido como "Ideario de don Eugenio Garza Sada", mucho antes de que los códigos de ética y las declaraciones de misión fueran comunes en el ámbito empresarial. Este documento consta de 17 normas y conceptos personales, con la intención de guiar la conducta y las acciones de sus colaboradores. 

Garza Sada distribuyó este Ideario entre sus colegas de trabajo, alentándolos a colocarlo en un lugar visible en sus oficinas. Él mismo fue el primero en seguir este ejemplo.

 

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