Las estudiantes buscan destacar el trabajo y la resistencia de las mujeres en sus vidas diarias, mostrando estas experiencias desde una mirada femenina
Por Ana Karen Becerril | Redacción Nacional CONECTA - 01/07/2025 Fotos Liz Lobato, Ximena Belmont, Maximiliano Bañuelos
Read time: 9 mins

Seis estudiantes del  Tec de Monterrey campus Ciudad de México destacaron en el Festival de Cine de VIBRART 2025 con dos cortometrajes que nacieron como proyectos académicos.

Mientras Yo Viva ganó como mejor documental y Xoco recibió mención honorífica en la categoría Ficción.. Ambas producciones fueron creadas bajo una visión colectiva, feminista y humana.

Para lograr esto, Valeria Becerra, Mena Becerril, Majo Reveles, Marian Velázquez, Melanie Escalante y Ana Serna, relataron a CONECTA que no solo formaron un equipo, sino una familia.

Sus historias retratan la vida de mujeres desde distintas realidades: la cultura sonidera en Xoco y la lucha ecofeminista en Milpa Alta en Mientras Yo Viva.

 

 

“Estos cortos los hicimos entre mujeres, para mujeres, dijeron las alumnas del campus Ciudad de México.

Dichos proyectos audiovisuales estuvieron disponibles en Nuestro Cine MX, la plataforma de streaming de cine mexicano del Instituto Mexicano de Cinematografía (IMCINE).

“No solo aprendí de las historias de las mujeres que estaba retratando, sino también de las mujeres con las que estaba trabajando”, compartió Melanie Escalante, directora de arte en ambos proyectos.

Las 6 estudiantes compartieron con CONECTA cómo fue su forma de trabajar, el proceso creativo y la lucha feminista.

“Estos proyectos me cambiaron la vida", dijo Marian Velázquez, sonidista, editora y guionista.

"No porque hayan sido los más revolucionarios o lo mejor que he hecho en mi carrera, sino porque conocí personas con vidas tan distintas a la mía, que me enseñaron a valorar cosas que antes pasaba por alto”, agregó.

 

Estudiantes del Tec durante la realización de sus documentales
Estudiantes del Tec en el set durante la grabación de los documentales. FOTO: Maximiliano Bañuelos y Ximena Belmont

 

Xoco: Retratar la cotidianidad con cumbias de fondo

En los tianguis de la Ciudad de México hay sonidos que no se apagan. Un retumbar constante que viene de las bocinas que vibran en los puestos y de los anuncios de conciertos pegados en postes oxidados.

Es ahí, en ese caótico paisaje sonoro, la cuna de Xoco, un cortometraje dirigido por Mena Becerril y Majo Reveles, que ve en la cultura sonidera mucho más que música.

“Buscamos transmitir una historia nutrida en la identidad y la visibilización de las comunidades de barrio, inscritas en la cotidianidad mexicana y la cultura sonidera”, dijo Majo Reveles.

La historia sigue a Xoco Mercado, una adolescente con talento para la mezcla, que un día se queda sola. 

Su hermana mayor, Ainara, se va sin decir por qué, y esa ausencia se convierte en el hilo conductor de una búsqueda, a veces literal, a veces simbólica, de un sentido de pertenencia.

Xoco ganó una mención honorífica en la Categoría Ficción, dentro del Festival de Cine en VIBRART 2025.

 

 

Xoco es, en palabras de Mena: un “primer paso hacia la visibilización de realidades e historias que valen la pena ser retratadas y que no necesitan el permiso de nadie más para poder existir”.

“Los sonideros son una parte fundamental de la identidad 'chilanga'. Son espacios de democratización y gozo, que deberían tener más reconocimiento en los espacios artísticos, especialmente en las artes hegemónicas”

Para Mena, este cortometraje es más que un ejercicio audiovisual, sino una forma de demostrar historias que nacen en la periferia, que muestran distintas realidades, historias humanas.

 

“Al final del día, si logras que las personas depositen alma y corazón en un proyecto, va a terminar siendo uno de los mejores proyectos solo por el simple hecho de mantener esa esencia”. - Mena Becerril

 

Mena explicó que no fueron solo esas experiencias las que alimentaron la narrativa y el universo de Xoco, sino que encontraron más. 

Durante la realización del cortometraje, hubo un encuentro que marcó el rodaje. El equipo conoció a Abigail Puebla Sánchez, mejor conocida como la Reina Rumba: la primera mujer trans sonidera a nivel mundial

“Nos gustaría que las y los espectadores se acerquen a estas historias con el corazón, los ojos y oídos bien abiertos”, mencionan las realizadoras. 

“Que puedan recibir con cariño expresiones artísticas con las que quizá no están familiarizados, pero en las que también hay belleza y autenticidad”.

 

Equipo de estudiantes que realizaron los documentales ganadores de Vibrart 2025
De izquierda a derecha: Oscar Palacios asesorando en el encuadre. Equipo de las chicas con el equipo de producción musical de Tec CEM que realizaron la banda sonora original. Chío con las chicas y Óscar en su milpa. Fotografías: Maximiliano Bañuelos y Liz Lobato)

 

Mientras Yo Viva: dignificar la labor del campo con lentes de sororidad

Descrito por los jueces como “una obra íntima que honra la memoria y da voz a las raíces”, y dirigido por Valeria Becerra y Mena Becerril junto con el colectivo Mujeres de la TierraMientras Yo Viva es un viaje al corazón de Milpa Alta.

Este corto documental, ganador de la Categoría Documental, sigue la historia de cuatro mujeres: Chío, Alma, Gris (integrantes del colectivo) y Gloria (la abuela de Valeria), cuyas realidades entrelazan lucha y resiliencia en la Ciudad de México.

“Nuestro primer encuentro con ellas (Mujeres de la Tierra) fue en una charla de ecofeminismos.

"En ese momento sentí una conexión profunda con sus ideales, porque compartíamos la misma necesidad de preservar nuestras herencias y, sobre todo, de darlas a conocer", expresó Valeria, quien nació y creció en Milpa Alta.

“El documental nace como un ejercicio de preservación. Del pasado, de mi familia y de todas esas memorias que forman parte del territorio donde crecí, pero que por la centralización de la ciudad, ya no estoy tan cerca de ellas”, compartió la directora.

 

Estudiantes del Tec durante el rodaje de los documentales que les dio el premio en VIBRART 2025
Las estudiantes del Tec en Ciudad de México durante el rodaje. FOTO: Liz Lobato

“Más adelante, Mena, mi amiga codirectora, contactaría a Chío para crear este proyecto en total colaboración, de manera horizontal, recíproca y siempre basada en el respeto”, añadió Becerra. 

Mujeres de la TierraMujeres de la Periferia es un colectivo conformado por cuatro hermanas y un par de vecinas de Milpa Alta que enfrentan violencia doméstica y buscan una independencia económica. 

A través de la venta de tamales, tortillas y tlacoyos, preparados con maíz cultivado por ellas mismas en las milpas de esa región, estas mujeres no solo defienden la soberanía alimentaria, sino que también desafían el olvido de la megápolis mexicana.

 

Las mujeres cultivan el maíz
Grabación de las mujeres cultivando su propio maíz. FOTO: Liz Lobato

 

“El cultivo está más cerca de lo que pensamos. El maíz, a pesar de ser “tan común”, está presente en las mesas de cualquier casa mexicana, pero rara vez nos preguntamos de dónde viene. 

“La gente tiende a ignorarlo, a apartarlo de su visión cotidiana, a pesar de estar tan presente y guardar tanto simbolismo. Olvidan que Milpa Alta, a  pesar de ser una de las periferias de la ciudad, forma parte integral de su identidad”, expresó Marian Velázquez, quién apoyó en la redacción e investigación del guión documental. 

Y es que para las Mujeres de la Tierra, el maíz es mucho más que su ingrediente primordial; es un legado que llevan con orgullo desde su infancia, cuando, bajo la guía de su madre, comenzaron a descubrir la versatilidad y generosidad de este grano. 

Para ellas, el maíz representa una herencia que abarca toda una historia: desde la siembra hasta la cocción, transformando a este grano en un alimento cargado, además de sabor, de memorias. 

Estamos profundamente agradecidas con ellas por habernos recibido y abrazado con tanta generosidad. 

“Creo que es fundamental que la labor de estas mujeres no se limite a Milpa Alta, sino que se visibilice en toda la ciudad, para que más personas reconozcan sus luchas”, complementó Majo Reveles.

 

mujeres de la tierra
Mujeres de la Tierra. FOTO: Liz Lobato

 

 

‘Benditos entre las mujeres’: un piloto, músicos y un par de cineastas

Si bien el proceso creativo de estos cortos y sus significados fueron construidos desde miradas femeninas, la parte técnica y de edición también fue resultado de un trabajo colectivo y colaborativo.

Luis Eduardo Castillo, egresado como piloto privado y apasionado del cine, encontró en la comunicación su segunda carrera y se convirtió en una pieza clave para la edición de Xoco.

“Era el único hombre en un equipo completamente formado por mujeres, y aunque al principio eso me hizo sentir algo fuera de lugar, pronto me di cuenta de que no podía haber estado en mejor compañía

“A veces me encontraba callado, observando cómo las ideas fluían entre ellas con una soltura y una sensibilidad distinta a lo que había vivido en otros proyectos”, compartió Luis.

Asimismo, el equipo contó con el respaldo fundamental de Luis Diego Rodríguez Velasco, ganador del Festival de la Canción en VIBRART 2024,  quien se encargó de dar alma al proyecto a través de una banda sonora original pensada especialmente para cada escena. 

Acompañandolas, Óscar Palacios aportó su mirada y experiencia en la asistencia y asesoría fotográfica, mientras Rodrigo Vidal sumó su talento en la corrección de color

En el área de sonido, Luis Gutiérrez y Adrián Esparza se encargaron también de apoyar a construir el ambiente sonoro que terminó de dar vida y fuerza a estos relatos. 
 

Estudiantes del Tec grabando Xoco
Estudiantes del Tec durante la grabación de XOCO. Foto: Maximiliano Bañuelos

Crear cine no es “solo de grabar”

Para Melanie, el cine es observar plena y lentamente, no solo es llegar a un sitio a grabar, se trata de encontrar refugio en ideas compartidas y hallar consuelo en el sostén que ofrece una comunidad.

“No porque tu traigas la cámara, o porque tengas el presupuesto, o porque sea tu proyecto significa que es tuyo. Nunca nada va a ser tu proyecto, y menos un corto de este tipo”.

Hoy, a un año de graduarse de la Licenciatura en Comunicación, las chicas continúan su trayectoria.

Algunas especializándose en cine, otras en periodismo, pero siempre compartiendo el mismo propósito: ser voceras de las historias que las rodean. Y narrarlas, amablemente, siempre que exista la posibilidad, juntas. 

“Al final del día, si logras que las personas depositen alma y corazón en un proyecto, va a terminar siendo uno de los mejores proyectos solo por el simple hecho de mantener esa esencia”, finalizó Marian.

 

Sobre VIBRART 2025

VIBRART 2025 es la quinta edición del evento de arte y cultura más emblemático del Tec de Monterrey, en el que miles de estudiantes participan en una diversidad de eventos en formato concurso, independientemente de la carrera profesional que están estudiando.

“Necesitamos más artistas en las escuelas, no para tener más arte, sino para formar mejores seres humanos. El arte enseña concentración, disciplina y propósito de vida”, explicó Luis Raúl Domínguez, decano nacional de Liderazgo y Formación Estudiantil.

El festival está conformado por 8 categorías: Canción, Tec Dance, Cine, Creación literaria, Concurso de Artes visuales, Monólogos, además del Premio al Talento que inspira y Tec Talent.

En esta edición, más de 4 mil 500 jóvenes participaron en las eliminatorias locales y cerca de mil fueron seleccionados para compartir su talento en el escenario nacional.

Este festival se llevó a cabo del 18 al 25 de mayo en la ciudad de Querétaro.

 

LEE TAMBIÉN:

Seleccionar notas relacionadas automáticamente
0
Campus:
Categoría: