La pieza elaborada por Rogelio Madero en 1994 descansa en la Plaza Estudiantil del Tec de Monterrey en Torreón.
De vestir el Tec campus Monterrey a engalanar el campus Laguna. La escultura elaborada por Rogelio Madero que representa el pensamiento creativo encontró su lugar de descanso permanente.
El 24 de marzo de 2023 en la Plaza Estudiantil del Tec de Monterrey en Torreón, directores y consejeros inauguraron y develaron la placa de la obra que el artista diseñó y fabricó para la institución en 1994.
“El Tec de Monterrey se ha abierto a muchas ideas y eso es lo que representa esta escultura”, señaló en el acto el consejero honorario Sr. Alejandro López Díaz Rivera, donador de la figura artística.
"El Tec se ha abierto a muchas ideas y eso es lo que representa esta escultura".- Alejandro López.
Del Tec campus Monterrey a Laguna: el viaje de la escultura de Rogelio Madero
La escultura de Rogelio Madero llegó al campus Laguna tras 21 años en campus Monterrey.
La obra se ubicó originalmente en el jardín exterior de la antigua biblioteca del campus neoleonés. Pero en 2015, tuvo que ser resguardada para la construcción del nuevo recinto lector.
Como consecuencia, Patrimonio Cultural del Tecnológico de Monterrey se encargó de encontrarle un hogar y entabló pláticas con el director del campus Laguna, Eduardo Javier Arrambide Leal.
“Cuando me comentaron sobre la posibilidad de traer la escultura la recordé con mucho cariño en campus Monterrey. Fue muy emocionante saber que podríamos traerla”, expresó.
De esa forma, en 2022 se concretó su traslado a la ciudad de origen de su autor, Torreón, e inició su proceso de restauración.
Realizan trabajos contra la corrosión de la escultura
La restauración de la escultura estuvo a cargo del arquitecto David Medina Vargas en un espacio designado del Edificio I, el Centro Integral de Manufactura y Tecnología (CIMTEC) del Tec de Monterrey campus Laguna.
Sus esfuerzos se concentraron en eliminar la corrosión natural que sufrió al estar expuesta por tantos años a la intemperie.
“(En Monterrey), la humedad del jardín, la lluvia y el polvo del ambiente disgregó el metal y creó patrones en las flamas como si estuvieran rayadas”, explicó.
La obra, detalla Patrimonio Cultural, está fabricada de bronce, latón y hierro. Además, muestra las características de las obras de Rogelio Madero: contrastes entre texturas con partes pulidas y algunas rugosidades.
Su misma composición provocó que el agua se adentrara a la obra y provocara daño en su interior.
“Abrimos la pieza, la seccionamos y nos dimos cuenta del daño. Por eso, cortamos toda la estructura y la sustituimos por una nueva estructura de cobre”, comentó el arquitecto.
Asimismo, detalló que “se le hizo una limpieza con arena a presión que lo que hizo fue eliminar todo el rastro de corrosión, quedando el metal en su estado natural”.
Después, la obra fue recubierta con cromato de zinc y polímeros, “que es como un doble escudo para evitar que la corrosión vaya de adentro hacia afuera”.
Finalmente, la escultura fue cerrada con soldadura de bronce y se limpió su exterior con cerdas de latón para llevar el material a su estado natural, el cual también quedó protegido con un recubrimiento de acero y polímeros.
Concluidos los trabajos de restauración en el Edificio I, la pieza fue trasladada al centro de la Plaza Estudiantil, donde anteriormente se hallaba una fuente.
Ahí, los directivos del campus y miembros del Consejo Educación y Tecnología de La Laguna A.C. (ETLAC) realizaron la inauguración acompañados de estudiantes y colaboradores.
"Recuerdo con cariño la escultura en Monterrey y fue emocionante saber que podíamos traerla a Laguna".- Eduardo Arrambide.
La escultura: su significado y composición
La escultura sin título oficial de Rogelio Madero mide alrededor de 3.5 metros de alto y 3.60 de ancho; además, pesa alrededor de 300 kilos.
De acuerdo con Patrimonio Cultural del Tecnológico de Monterrey, es una obra constituida por tres flamas conectadas entre sí.
Lo anterior representaría las líneas orgánicas y flexibles del pensamiento creativo, pues como expresó el donante, Sr. Alejandro López Díaz Rivera: “El Tec se ha abierto a muchas ideas”.
Esa premisa, ahora se encontrará con la escultura de manera permanente en el Tec de Monterrey campus Laguna.
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