Ricardo Saldívar Escajadillo, presidente del Consejo del Tec de Monterrey, comparte su convicción de que no hay causa más valiosa que educar para dejar huella en la sociedad.
Por Ricardo Saldívar Escajadillo | Presidente del Consejo Directivo del Tec - 06/03/2023 Fotos Alejandro Salazar

Ricardo Saldívar Escajadillo | Opinión | Presidente de Consejo del Tec de Monterrey


Escribo estas palabras con una nueva responsabilidad en mi vida personal y profesional.

Recientemente fui electo como nuevo presidente del Consejo Directivo del Tecnológico de Monterrey, suceso que me hace sentir sumamente honrado, enormemente comprometido y muy agradecido con las personas que han confiado en mí para esta responsabilidad.

Es un privilegio que me emociona y me compromete como padre de familia, como integrante de la comunidad Tec y como mexicano.

Como alumno, becario, profesor, consejero, benefactor y, sobre todo, apasionado del Tec, entiendo la relevancia que tiene esta institución.

Mi larga relación con el Tec lo ha convertido en una causa que me ha permitido ir cumpliendo mi propósito de vida y que ahora me reta a construir un legado que trascienda.

Este año, el Tec celebra su 80 aniversario y en esa coyuntura recuerdo a don Eugenio Garza Sada, quien dijo que “lo que uno es y puede poseer es una oportunidad para ofrecerlo a los demás y una oportunidad de servicio”. Esta es la esencia del Tec. La oportunidad, capacidad y voluntad de quienes formamos parte de esta gran institución para sumar al desarrollo de nuestra comunidad.

 

Ricardo Saldívar Escajadillo.

 

Quiero reconocer a José Antonio Fernández Carbajal, presidente saliente, por su excelente labor al frente de esta institución. Durante 11 años, ha logrado llevar al Tec a una muy sólida posición a nivel mundial con un enorme legado.

Nuestra visión al 2030 define de manera muy precisa el propósito de lo que hacemos: el florecimiento humano, que consiste en ser una mejor persona para sumar a una mejor comunidad y tener un mejor planeta. En esto consiste el desarrollo de la sociedad y ahí reside la profunda vocación social del Tec. A ella nos debemos y a ella debemos sumar todo lo que realizamos como institución.

Además de nuestra visión al 2030, contamos con un plan hacia el 2025 y pondremos especial atención a cuatro estrategias prioritarias:

1) El desarrollo de la investigación aplicada que nos permita impulsar el emprendimiento, la  curiosidad intelectual y la generación de conocimiento como herramientas para resolver los problemas de la sociedad, e incrementar nuestro prestigio como universidad.

2) El enfoque en las ciencias de la salud para seguir posicionándonos como líderes en la materia. Seguiremos desarrollando este tema a través de la formación académica, la atención clínica y la investigación que hoy nos coloca como un centro de vanguardia en la materia.

3) La creación de programas de aprendizaje a lo largo de la vida a través de distintas plataformas. Es necesario crear nuevos modelos educativos, híbridos o digitales, que permitan ofrecer oportunidades de aprendizaje alternas para la vida laboral.

4) Con el propósito de acelerar y potenciar al máximo lo que haremos en estas tres estrategias, nos apoyaremos en alianzas nacionales e internacionales como cuarta estrategia. Sólo en equipo podemos transformar nuestras comunidades, nuestro país y nuestro mundo. Haremos del Tec un Tec más global, desarrollando nuestro talento más allá de las fronteras y acercando talento global a nuestro entorno. Como consecuencia, tendremos acceso a recursos de filantropía y fondos globales que pondremos al servicio de la sociedad.

El Tec está formado por un equipo talentoso, comprometido y apasionado. Tenemos el reto de reconocer que somos parte de una historia y que estamos llamados a transformarla e impulsarla al futuro; de asumir nuestro propósito y compromiso, de dejar huella en la comunidad, y de darle más a la sociedad.

Estoy seguro de que no hay causa más valiosa que la educación, y que el Tec ha construido en ochenta años uno de los legados más dignos, comprometidos y trascendentes para México.

Tengo el honor y la responsabilidad de formar parte de la historia del Tec y estoy seguro de que con trabajo y dedicación, aprovecharemos esta gran plataforma para el florecimiento humano, dejando una profunda huella en las personas, en la comunidad y en el mundo.

 

El autor es presidente del Consejo Directivo del Tecnológico de Monterrey.

** Este texto fue publicado el 5 de marzo del 2023 en los diarios Reforma, El Norte y Mural, y se reproduce con permiso.

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