Mejoramiento académico y orientación vocacional son 2 elementos que han definido la labor de Adriana Amezcua durante 31 años de trayectoria en el Tec y por los cuales fue reconocida con el Premio a la Formación LiFE 2024.
“Ha sido una labor muy bonita todo lo que tiene que ver con el plan de vida y de carrera de los jóvenes, siempre que haya oportunidad de hacerlo lo seguiré disfrutando porque es una manera muy bonita de trascender en su vida”, aseguró.
Actualmente, Adriana Amezcua es coordinadora del área de Mejoramiento Académico del Departamento de Bienestar y Consejería del campus Monterrey.
El pasado 11 de junio fue reconocida con la distinción por trayectoria LiFE en una ceremonia celebraba en campus Monterrey.
En el evento se reconocieron también a otros 4 formadores LiFE por su labor con los estudiantes.
“Este reconocimiento me llena de mucho orgullo e implica más compromiso con el Tec, mis alumnos y profesores.
“Además de que me da más ánimo de continuar lo que estoy haciendo, me hace sentir que es importante y trascendente con ese compromiso continuo, es algo invaluable para mí”, comentó.
“Tenía 20 años cuando di mi primera clase, aún no terminaba la carrera, y mis estudiantes me confundieron con alumna".
Define trayectoria profesional en el Tec
Amezcua comenzó su trayectoria en el Tec campus Querétaro, donde se integró al Departamento Psicopedagógico como parte de sus prácticas profesionales.
“Estudiaba la carrera en Psicología en la Universidad Autónoma de Querétaro cuando 2 años antes de que yo me graduara me invitan a colaborar en el Tec. Inicié haciendo mis prácticas.
“Me encargaba de toda el área de vocación profesional y también daba algunas clases, además tenía a mi cargo el Centro de Orientación y daba clases en el PA (Programa Académico)”, explicó.
Ocho años después, Adriana Amezcua llegó a campus Monterrey.
“Nos cambiamos de residencia porque invitan a colaborar a mi esposo a campus Monterrey, y al llegar me integro a la Universidad Virtual a un área de investigación educativa con la profesora Dora Estela Rodríguez”, recordó.
Entre las materias que ha impartido la profesora se encuentran Orientación Vocacional, Relación Humana, Filosofía, Programa de Desarrollo de Pensamiento PDHD, Desarrollo Integral I y II, Seguimiento Académico, Psicología y Psicopatología Clínica, por mencionar algunas.
También se ha desempeñado como tutora académica de varias materias en la Maestría en Educación y en la carrera de Psicología Organizacional, además de participar en diversos rediseños de materias.
“Estudiaba la carrera en Psicología cuando 2 años antes de que yo me graduara me invitan a colaborar en el Tec".
Consejo de su madre inspira camino docente
La idea de la docencia siempre estuvo presente en la mente de la profesora Amezcua, pero un consejo de su mamá la hizo reflexionar sobre su carrera profesional.
“Yo quería estudiar docencia, pero mi mamá me dijo: ‘no, mejor estudia otra cosa porque eso que tú estudies te va a dar para poder dar clases y, adicionalmente, tienes una formación distinta’”, mencionó.
Historia del Arte, Letras Españolas y Filosofía, fueron algunas de las disciplinas en las que se interesó, pero al final se decidió por Psicología.
“Ya cuando estudié la carrera, no me imaginaba dando clases, pero finalmente acabé impartiendo clases, que era lo que originalmente yo quería, me di cuenta de que mi mamá fue una buena orientadora vocacional”, señaló.
La docente compartió que uno de los mayores retos al inicio de su trayectoria como docente fue lograr que sus estudiantes la reconocieran como profesora.
“Tenía 20 años cuando di mi primera clase, aún no terminaba la carrera, y mis estudiantes me confundieron con alumna.
“Me acuerdo de que llegué al salón y me quedé afuera esperando a mis alumnos y no pasaban al salón, hasta que les dije ‘¿por qué no pasan?’ y me dicen ‘es que estamos esperando a la maestra’ y les tuve que decir que yo era la maestra”, agregó.
“Ha sido una labor muy bonita todo lo que tiene que ver con el plan de vida y de carrera de los jóvenes".
Busca compartir su experiencia
Documentar su experiencia y compartirla con sus colegas es una de las labores en las que se ha enfocado actualmente la docente.
“Algo que ha enriquecido mi labor y la de mis colegas es la parte de la creación de conocimiento, creo que eso es algo indispensable para poder trascender en el abordaje de cualquier índole.
“Darme el tiempo para poder meditar todo lo que he leído, conversado y visto de manera empírica y verlo plasmado en un escrito te da la capacidad reflexiva de compartir”, precisó.
Agregó que dentro de sus planes se encuentra el redactar un libro.
“Creo que es el momento de bajar esas experiencias a un libro enfocado en educación y en la función del tutor de acompañamiento en esta parte de generar vínculos positivos con el estudiante”, afirmó.
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