Interés por alumnos le da premio Profesora Inspiradora en Tec Puebla

“No podía dormir de la emoción, alguien me invitó a postularme y no quería, las cosas se hacen para servir, no por un premio” expresó Déborah Von Nacher, ganadora en campus Puebla del premio Profesora Inspiradora 2022 del Tec de Monterrey.

Debbie, como es conocida por la comunidad, añadió que horas antes de saberse ganadora en el marco del Día de las y los Profesores, no la pasaba bien.

“Dije, ¿y si no gano? quiere decir que no es suficiente lo que hice. Mi jefa sabía el resultado, pero no me podía decir, solo preguntaba ¿pero sí vas a ir?”, compartió la catedrática entre sonrisas.

Von Nacher es profesora de Ciencias Sociales en PrepaTec. Da clases de Actores y perspectivas multiculturales en el Programa de Multiculturalidad y Filosofía; es conocida por su trabajo y por su sensibilidad hacia estudiantes y el impacto social.

“Podemos ser una sociedad más equitativa, me dicen que soy ingenua o soñadora, pero creo que sí se puede, no es que te vuelvas misionero o voluntario, pero cada quien desde nuestra trinchera podemos hacer un medio mucho más justo”.

“Después de este premio ya es una responsabilidad, me siguen motivando mis alumnos y esta idea de que si podemos cambiar, México nos necesita”.

Con una mueca de franqueza, Debbie reconoció ser consciente de que varios de sus compañeros también son merecedores del premio, y que de no haberlo obtenido ella,  le hubiera dado gusto ver que alguien más lo ganara.

“El premio no es mío, porque todos, los de mantenimiento, de limpieza, jardineros, LiFE, compañeras y compañeros me dan tips de qué hacer, el premio no debería decir Déborah, debería decir premio al campus Puebla”.

Reflejando el humanismo

La expresión “hay que predicar con el ejemplo”, se adapta al modo de actuar de Débora Von Nacher, quien impulsa a sus alumnos a ayudar a los demás.

“Quiero que cada actividad sirva para crear comunidad, todos tenemos algo que enseñar y todos tienen algo que enseñarnos, con eso hacemos comunidad”.

Por eso comparte que través de sus clases, la catedrática trata de que cada actividad sea una enseñanza y un aprendizaje para todos los involucrados.

"Después de este premio ya es una responsabilidad".

“Una vez sembramos árboles en unas primarias, con un taller de Educación para la paz; primero los jardineros del campus nos enseñaron a sembrar, después nosotros enseñamos a los niños”.

“Quiero que mis alumnos vean que todos somos una comunidad, que si estamos bien es porque todos hacemos nuestro trabajo, me importa que reconozcan el trabajo del Tec como familia”.

Y la ganadora es…

“Lo único que sentí al oír mi nombre fue la sonrisa que no se me quitaba, fue un sentimiento tan padre que era la una de la mañana y no podía dormir por la emoción” expresó Debbie.

La popularidad de la profesora Von Acher le ha brindado amistades entrañables, como la del profesor Gerardo Cendejas, con quien ha conducido diversos eventos para el Tec.

“Antes éramos maestros de ceremonias, cuando me enteré que él iba a ser el maestro de ceremonias le comencé a decir traidor, ¿cómo vas a hacerlo sin mí? Después me di cuenta por qué no me invitaron a ser maestra de ceremonias” dijo divertida.

Un largo camino

Déborah Von Nacher estudió Ingeniería en Manufactura, pero su corazón siempre la llevó por el camino del terreno social. Tras graduarse en el año 2000 e incursionar en el terreno laboral, comenzó a dar muestras de su vocación por servir.

“Comencé en una empresa que hacía hebillas, ahí me di cuenta de que había conflictos; en la carrera aprendí sobre producción, pero no sobre el trato humano”.

Tras lo anterior, Debbie decidió estudiar la Maestría en Resolución de Conflictos, que aunque enfocada en Relaciones Internacionales, sirvió para enamorarla del tema.

“Me dije: tengo que regresar a México, si no de qué sirve lo que aprendí. Ahí empecé a dar talleres en diferentes empresas sobre resolución de conflictos, eso me gustó”.

Entendiendo adolescentes

Cuando la profesora Von Nacher ingresó al Tec de Monterrey, se enfocó en dar clases en profesional y en prepa.

“Pero dar clases en prepa es un reto, tienes que enamorar a los alumnos; los chicos no quieren ni siquiera estar ahí; a veces ni te pelan, ahí es donde inicia el reto”.

Debbie expresó que con el tiempo ha aprendido a encontrar momentos, frases y argucias, para llamar la atención de sus alumnos.

“Me ha pasado que de repente dices algo que le llama la atención al alumno, te voltea a ver y deja el celular, ese momento en que dejan el celular es así de ya gané, y te das cuenta de que cuando entienden los conceptos la cara les cambia”.

“Que Nobel ni que nada, que un adolescente te ponga atención y deje el celular porque le interesa lo que estás diciendo, no tiene comparación”, expresa Debbie otra vez entre risas.

En ese sentido, la catedrática cree que poner atención al tema de la salud mental en las nuevas generaciones, toma relevancia en la actualidad.

“Las y los veo más vulnerables, entonces es ayudarles a lograr paz interna, dejar fuera la ansiedad y sentirse bien; luego es tener paz en mi círculo”.

Una preocupación de la maestra radica en enseñar a sus alumnos el lenguaje a utilizar, qué hacer cuando ven que la gente tiene miedo y no tomar las cosas personales.

“Estos años cambió mi percepción hacia los adolescentes, a veces parece que hacen cosas a propósito, pero no; es confiar en uno y saber que tienes herramientas para ayudarles”.

"Dar clases en prepa es un reto, tienes que enamorar a los alumnos".

 

Impacto social

A través de sus materias, Debbie ha contribuido junto a sus estudiantes con Techo, organización dedicada a mejorar condiciones de vivienda para personas en condiciones de vulnerabilidad.

“En esos casos también es darle tranquilidad a los padres de familia de que sus hijos están seguros, haciendo un bien a la sociedad en solo un fin de semana”.

“Cuando fuimos a esa actividad, la mayoría de mis alumnos me comentaron que habían llegado pensando que le iban a cambiar la vida a alguien, pero fue al revés, al regresar sintieron que las personas a las que ayudaron les cambiaron la vida a ellos”.

Compartiendo experiencias con colegas

La profesora de PrepaTec Puebla ha compartido con sus compañeros que no tomarse las cosas de manera personal y mostrar empatía, es una fórmula para el éxito entre los adolescentes.

“Les he comentado, y más cuando los estudiantes copian, que no se lo tomen personal, que ellos no lo hacen para dañar; debemos tener en cuenta que la parte del cerebro de los jóvenes que toma decisiones no se desarrolla sino hasta los 25 años” explicó.

“Cuando más descontrolados se ponen es cuando más te necesitan, te dicen: hazme caso y ayúdame; hay que ser amables, no sabemos las batallas que tienen dentro”.

Colofón

Déborah Von Nacher comenzó a dar clases en el Tec de Monterrey en el año 2004, en el campus Central de Veracruz. Del año 2008 al 2010 pasó a la iniciativa privada para mejorar sus habilidades; finalmente llegó al campus Puebla en el 2010.

La profesora relató que hace 13 años, cuando ya trabajaba en Puebla, sufrió un asalto en carretera; el único lugar en el que sentía un refugio estable era el Tec.

“Tuve miedo, sentía inseguridad en todos lados, el único lugar donde me sentía segura era aquí. El Tec es mi casa y la cuido, así como a los que están aquí conmigo porque es mi casa” finalizó.

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