Desde prepararse con su celular, selfie stick, tripié, algunos plumones y un pintarrón, la profesora Beatriz González del Tec campus Monterrey inicia su semana con esta dinámica.
Para la directora de carrera de Mercadotecnia, pensar fuera de la caja, aprender de tecnología de manera autodidacta y autograbarse para sus clases, son algunos retos que la maestra ha tenido que enfrentarse.
A pesar de haber impartido clases en línea anteriormente, ella sigue aprendiendo de las aulas digitales y descubriendo herramientas para adaptarse a sus clases.
Siendo madre de dos hijas, también ha sido un reto personal al compartir espacios físicos de trabajo en casa y cuidar de la salud mental de todos.
¿CÓMO ENSEÑA ESTA PROFESORA?
Después de levantarse, arreglarse y dar su clase, esto es lo interesante de la maestra.
Para hacer de sus clases de estadística aún más efectivas, preparó un espacio en su casa donde se autograba explicando sobre el tema a estudiar para la clase siguiente.
“Antes de mis clases, pongo mi celular a grabar en un selfie stick sobre un tripié, con un pintarrón y unos plumones empiezo a explicar el tema a mis alumnos”.
Para esto, al terminar los videos, los edita con ayuda de su hija, los sube a una carpeta de Google Drive y se las comparte a sus alumnos para que lleguen a la sesión con el tema visto y estén listos para preguntar dudas.
APRENDIZAJE DE LOS PROFESORES
“Abrir carpetas de Google Drive, obtener una liga, estar viendo a mis alumnos en Zoom, compartir mi pantalla, algún video, revisar que se escuche. Desde luego, muchos aspectos de tecnología”.
Aunque el Tecnológico de Monterrey capacitó a sus profesores en ciertas herramientas, Beatriz los describe como autodidactas para poder aprender nuevas tecnologías por sus cuentas.
“Tuvimos que pensar fuera de la caja, reinventarnos y diseñar programas que pudieran funcionar para un aula digital”
Gracias a que la maestra había impartido clases de mercadotecnia en la Universidad Virtual con la herramientas de Blackboard Collaborate y Zoom para clases de profesional, pudo adaptarse más rápido.
“Hasta que no estás dentro de la aplicación y usas las herramientas que hay, te das cuenta del potencial que tiene. No me siento una experta, pero sí más diestra desde la última vez que di una clase en línea”.
DE AULA PRESENCIAL A AULA DIGITAL
Beatriz argumentó que en su clase de inteligencia de negocios para mercadotecnia iba a llevar revistas físicas a los alumnos donde iban a trabajar en el tema de segmentación de los lectores de cada revista.
“Ahora no las voy a poder llevar, estoy haciendo una PowerPoint con la cáratula de las revistas y les diré que entren a la biblioteca digital, allí tenemos miles de publicaciones de muchas revistas”
Para ella, ha sido difícil adaptarse a esta nueva modalidad, al no poder ver todos los trabajos en equipo, ya que dentro de Zoom los alumnos están divididos y los profesores deben acceder a cada breakout room para poder asesorarlos.
“Lo que físicamente no se puede, se puede con creatividad para poder generar herramientas que sean entretenidas, que no se pierda la calidad, y sea de interés para el alumno”.
BALANCE ENTRE LO PERSONAL Y PROFESIONAL
Relata que desde que le avisaron que debía hacer home office, se empeñó en que su rutina no se iba a ver afectada. Se despierta, se arregla y está lista desde temprano para empezar sus clases y preparar las siguientes.
En lo habitual, su familia y ella acordaron reglas para separar el trabajo y lo personal. Dejan de trabajar a la 1:30 de la tarde para comer juntos y terminan alrededor de las 6:30 de la tarde para incorporarse a su vida personal.
“Los primeros dos días no separé el trabajo de la casa, eran las 10 de la noche y yo seguía trabajando desde mi cocina. Después dije, esto no es sano, y aplicamos estas reglas”.
Hacer ejercicio, salir a la terraza para tomar el sol como fuente de vitamina D y jugar juegos de mesa, han sido algunas actividades que su familia y ella han tomado para despejarse de la rutina.
“A lo mejor sentimos que nos sobra tiempo, no maten el tiempo, no hagan cosas por matar el tiempo. Aprovechen el tiempo, es un buen momento para leer, entrar a cursos gratuitos o convivir con los tuyos”.
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