Alumno del Tec Guadalajara ganó el Premio Rómulo Garza 2021 por su tesis de maestría, cuyos resultados impactarían en la industria tequilera
Diego Díaz Vázquez, alumno de posgrado del Tec Guadalajara, ganó el Premio Rómulo Garza 2021 en la categoría Estudiante de Posgrado, como reconocimiento a su tesis de maestría cuyos resultados impactarían la industria tequilera.
Su investigación, aún en curso, tiene el objetivo de resolver una de las problemáticas importantes de la región jalisciense: el impacto ambiental de la producción de tequila.
El actual alumno de Posgrado en Ciencias con especialidad en Biotecnología (MBI), presentó en la convocatoria del premio su tesis: “Estrategias de bioeconomía circular aplicadas a la industria tequilera”.
Gracias a ella, ha desarrollado guías a través de diversos parámetros que brindarían alternativas a los productores para el aprovechamiento de residuos al elaborar esta bebida artesanal.
La alternativa resultante sería la generación futura de subproductos alimenticios para ganado, que además vincularía al sector tequilero con el sector pecuario, ambos relevantes en la región.
Investigación replicable en la industria
El proyecto facilita la transición del sector tequilero a un modelo productivo circular y con un mejor desempeño ambiental, pues la aplicación de la investigación se adapta a las características de cada empresa tequilera.
“La producción del tequila genera un residuo líquido (vinazas) con gran impacto en el ambiente. Por cada litro de tequila, se producen 15 litros de ese líquido.
“Las vinazas son generadas en cualquier proceso de destilación alcohólica, pero tiene distintas composiciones e implicaciones territoriales”, explicó Diego Díaz.
Destacó que previo a su proyecto no había un análisis formal de la dimensión de esta problemática. Sin embargo, observó consecuencias como:
- Afectaciones en cuerpos de agua
- Degradación de suelos y
- Emisiones a la atmósfera
“Espero generar un impacto para la gente y nuestro planeta. En el Tec trabajamos con problemáticas reales y con enfoque regional, para desarrollar soluciones tangibles que vivimos en Jalisco”.- Diego Díaz.
Y por ello, el también Ingeniero en Biotecnología (IBT), se enfocó en resolver esta problemática de la región y contribuir así a la reducción del impacto ambiental de esta industria.
El interés por este tema nació cuando realizaba sus Estancias Profesionales en la Secretaría de Medio Ambiente y Desarrollo Territorial (SEMADET) Jalisco, donde pudo tener vinculación con el sector tequilero.
“Considero muy valiosa la experiencia que me dio el Tec de vincularme profesionalmente con este organismo. Las estancias marcaron una visión; te inspira mucho más y me permitieron desarrollar este proyecto”, expresó Diego.
Colaboración con organismos involucrados
Para conocer la relevancia del problema, el primer paso fue la caracterización territorial, de la mano de la SEMADET, el Consejo Regulador del Tequila y la Cámara Nacional de Industria Tequilera.
El proyecto lleva 2 años de investigación y colaboró con 20 empresas tequileras, que facilitaron muestras de vinazas para su caracterización físico-química.
“A través de diferentes parámetros para evaluar los residuos, se determinaron los impactos ambientales de cada muestra mediante diferentes escenarios de gestión.
“Alimentamos estos datos en un sistema de información geográfica y se puede analizar desde una perspectiva territorial la problemática”, dijo el galardonado.
A partir de ello, identificó zonas de acción prioritaria, los municipios Tequila y El Arenal, lo que permite configurar una justificación de base tecnológica y científica replicable.
Con los productores, se plantearon escenarios de gestión, se identificó cuáles son las prácticas con mayor incidencia en el estado y se determinó el impacto ambiental.
Posteriormente, identificó la estrategia para tratar las vinazas con mayor beneficio ambiental y mejor alineada a las políticas del estado en cuanto a producción circular.
“Los principios de la economía circular indican que se tienen que favorecer los procesos donde el valor de la materia prima sea el máximo.
“Para que se mantengan dentro de nuestro ciclo productivo todo el tiempo posible, lo que reduce la generación de residuos y la demanda de nuevos recursos”, justificó el estudiante.
El proyecto fue asesorado por el profesor Sebastián Gradilla y coasesorado por la académica Carolina Senés, ambos de la Escuela de Ingeniería y Ciencias (EIC) del Tec.
“Me llena muchísimo de orgullo y me motiva que me hayan entregado este premio, me hace pensar que todo el trabajo vale la pena.
"Esto significa que la investigación da frutos y de verdad se pueden encontrar soluciones reales a problemáticas tangibles”, expresó Diego Díaz, ganador del Premio Rómulo Garza 2021 y alumno del Tec.
Actualmente, este proyecto está en una etapa temprana, como parte del Laboratorio de Sostenibilidad y Cambio Climático del Tec, el cual es de reciente creación.
Según el ganador del premio, aún faltan entre 1 y 2 años de investigación y validación para que se pueda ofertar esta tecnología a los tequileros.
“Espero generar un impacto para la gente y nuestro planeta. En el Tec trabajamos con problemáticas reales y con enfoque regional, para desarrollar soluciones tangibles que vivimos en Jalisco”, concluyó Diego.
Como un estímulo a los investigadores por su trayectoria y avances científicos, el Tec, en alianza con Xignux, entregaron desde el campus Monterrey el Premio a la Investigación e Innovación Rómulo Garza 2021.
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